Sociedad
“Si la lactancia es un derecho, las puericultoras debemos tener Ley”
Lo dijo la asesora en lactancia y técnica en psicología social Evelyn Godoy • La puericultura y su actualidad en Victoria y el país.
Victoria.- “Para comenzar a contar lo que es la puericultura y lo que hace una puericultora me gustaría primero aclarar que todo lo construido alrededor de esta maravillosa profesión es el resultado de una lucha de años, de mucha gente que quiere dedicarse a esto y de mucha gente que necesita de los servicios que prestamos”, comienza la asesora en lactancia y técnica en psicología social Evelyn Godoy.
“La puericultura, además de ser una profesión necesaria, es nada más y nada menos que una política pública preparada para acompañar desde la información y con las herramientas necesarias para proteger y sostener a toda madre y a todo niño en el inicio de su relación vincular (entre ellos y con su entorno) hasta los primeros años de vida, en lo que a la lactancia y crianza respecta”, continúa.
“Las puericultoras acompañan de manera integral a la diada (mamá-bebé), desde la puericultura como una disciplina científica, como un campo de conocimiento; contemplando aspectos físicos, psíquicos y emocionales de sus protagonistas”, especifica.
Llegado a este punto, señala: “Abordando lactancias y puerperios, en mi caso busco integrar también herramientas y conceptos de la psicología social (que es mi otra profesión). Atendiendo a las necesarias relaciones de las familias a las que acompaño con el resto de los ámbitos en los que se desenvuelven, cuestión que me ha sido de mucha ayuda en los que respecta al trabajo interdisciplinario”.
La profesional también da difusión a este tema en las redes sociales. “Creé mi Instagram Mamis de Tribu [@mamisdetribu] para comenzar a acercar a la gente de Victoria no sólo información sobre lactancia (soy Asesora en Lactancia desde el año pasado y sigo estudiando para ser Puericultora muy pronto), sino también para que las familias sepan que existe alguien que puede transitar con ellos múltiples procesos que van desde la preparación para la llegada de un bebé hasta su destete: afecciones mamarias, brotes de crecimiento, dolor al amamantar, banco de leche, vuelta al trabajo remunerado, entre otros”, cuenta.
“Tanto en la ciudad como en ciudades aledañas (acá en Victoria, en Oro Verde, en Paraná, en Aldea Brasilera y debe haber en muchos otros lugares) hay personas que se dedican a esto o estudian para hacerlo a futuro. No obstante, en mi opinión faltaban (y faltan aún) los cimientos para poder trabajar como corresponde y llegar a más personas”, opina.
Sobre esta misma tónica, prosigue: “Hablo de información, apoyo de las instituciones, de la comunidad. Podemos mañana invitar a una charla sobre «Primeros días del Recién nacido y Establecimiento de la Lactancia», pero si no se sensibiliza, si no se concientiza acerca de lo que hacemos las asesoras en lactancia y las puericultoras, el público no lo ve como necesidad. Podemos decir que la leche materna como tejido vivo se irá modificando según las necesidades del bebé y que esto es una de las cosas que la hacen única para todo recién nacido, pero si no hay espacios que vean lo importante que es saberlo y nos habiliten a comunicarlo comienzan los obstáculos”.
En este contexto, expresa: “Parece que una mamá que sufre dolor al amamantar tiene que aguantárselo o que las emociones durante el puerperio son cuestión de esperar que pasen, que la leche de fórmula sustituye a la teta sin más. Información, herramientas, capacitación para los equipos médicos, para las familias y su entorno, son menester”.
En cuanto al marco legal y la aplicación de las normas relacionadas a la temática, Evelyn menciona: “Tenemos leyes como la número 26873, que busca promocionar los beneficios únicos de la leche materna, concientizar acerca de la lactancia materna y prácticas óptimas de nutrición para bebés y niños; tenemos grandes organizaciones como la Liga de la Leche y la Organización Mundial de la Salud, que no paran de insistir en los beneficios, en la prevención. Está el código internacional de comercialización de sucedáneos que intenta hacerse lugar hace años, pero necesitamos mucho aún; entre esas necesidades está la de un Estado presente en todos sus niveles, efectores públicos que representen estos derechos y luchen a la par nuestra. Leyes como la que mencioné (o la de parto respetado) y hasta el mismo código internacional, hablan de los beneficios de la leche materna, de la importancia de la información acerca de esto desde el embarazo, de la capacitación del personal, promueve la creación de centros de lactancia, de bancos de leche, y sí, se relaciona con nuestra labor, pero no le da un aval ministerial ni un reconocimiento legal”.
La asesora en lactancia dice que, en el ámbito nacional, en las grandes ciudades, todo esto está “mucho más instalado”. “Las ciudades pequeñas necesitan un poco más de atención”, señala. “Igualmente, me encontré con profesionales que acompañan y mucho”, aclara.
Para Evelyn la difusión sobre la temática es muy importante. “Por todo esto me pareció coherente comenzar informando, capacitándome, contando lo que hago, lo que hacemos, involucrando a otros, preguntando; militando, si se quiere, y esta nota la veo como consecuencia de ese trabajo, por eso la agradezco”, dice.
“Desde Mamis de Tribu propongo lactancias posibles, reales, deseadas; la importancia de la leche materna como alimento por excelencia para los recién nacidos, que los puerperios sean en tribu, rodeados de profesionales de la salud idóneos, porque las puericultoras son y seremos eso, agentes de salud”, enfatiza.
“Se ha conformado un colectivo de puericultoras autoconvocadas (@leydepuericultorasya) que están organizando, dentro de esta lucha, una gran movilización para el 19 de mayo en Buenos Aires. El objetivo es que al tratarse en el Congreso el proyecto de ley que busca la regulación de nuestro rol como agentes de salud reconocidas y con título avalado por el Ministerio de Salud, esta necesidad se haga eco en cada rincón del país, un abrazo nacional. No sólo para nosotras, repito, también por cada familia que necesitó en algún momento o necesite a futuro de alguien que acompañe su embarazo, post parto, puerperio, crianza”, comenta.
Por último, concluye: “Si la lactancia es un derecho, las puericultoras debemos tener Ley. Es un camino largo, pero estamos comenzando con todo y creo que vamos a llegar muy lejos. Sólo hay que ir uniendo eslabones, haciendo red y gestando tribu. De más está decir que están todos invitados”.