Hospital Materno Infantil San Roque de Paraná
Aumentaron las atenciones por gastroenteritis en niños
El dato fue registrado por el área de Epidemiología del nosocomio y comprende hasta el 27 de enero, fin de la cuarta semana epidemiológica.
El Hospital Materno Infantil San Roque de Paraná ha reportado un notable incremento en las atenciones por guardia debido a casos de gastroenteritis. Según datos proporcionados por el área de Epidemiología del nosocomio, este aumento ha sido considerable hasta el 27 de enero, marcando el final de la cuarta semana epidemiológica.
Durante las primeras semanas del año en curso, se ha observado un aumento considerable en las consultas con diagnóstico de diarrea y gastroenteritis. Este incremento también se ha reflejado en el porcentaje de consultas en la guardia central de Pediatría, donde esta problemática ha sido la causa principal de atención.
Una comparativa detallada en una tabla expone un incremento progresivo en la cuarta semana de cada año: un 4,7% en 2022, un 7,4% en 2023 y un preocupante 15,1% en 2024.
La gastroenteritis es una afección común y altamente contagiosa en pediatría, causada por diversos agentes infecciosos como virus, bacterias o parásitos. Ante este panorama, el Ministerio de Salud recomienda a padres y cuidadores estar alerta ante los síntomas en los niños y acudir de inmediato al pediatra de cabecera o la guardia más cercana en caso de presentarse.
La Dra. Mailén Cabral, desde la Guardia del nosocomio pediátrico, señala que la gastroenteritis es una enfermedad viral autolimitada, lo que significa que suele remitir por sí sola. Los síntomas principales incluyen vómitos y diarrea. Para prevenir su propagación, enfatiza en la importancia del lavado de manos frecuente tanto en adultos como en niños, evitar la ingesta de alimentos en mal estado y de agua contaminada.
La higiene, especialmente en la preparación de alimentos y el manejo de elementos contaminantes como pañales, es crucial para prevenir la propagación de la enfermedad. Sin embargo, la causa exacta de la gastroenteritis puede variar, ya sea por factores como el calor, el consumo de agua no segura o una intoxicación alimentaria.
El mayor riesgo asociado con la gastroenteritis es la deshidratación, por lo que es vital estar alerta a ciertos signos de alarma, como vómitos persistentes o más de siete deposiciones líquidas en un corto período de tiempo. En el caso de los bebés, la falta de orina durante más de seis horas, la somnolencia, palidez, agitación y diarrea con sangre son señales de consulta inmediata.
La Dra. Cabral enfatiza que los pacientes menores de un año son los más propensos a deshidratarse, por lo que se recomienda continuar con la lactancia materna y ofrecerles agua para mantenerse hidratados. Ante cualquier caso, se subraya la importancia de una consulta oportuna con los equipos de salud y el pediatra de cabecera, quienes podrán brindar el tratamiento adecuado, como sales de rehidratación oral. Se desaconseja la administración de pastillas de carbón, sales u otras bebidas no indicadas por profesionales médicos.