En enero, una familia necesitó 26.443 pesos para no ser pobre
En el primer mes de 2019 la canasta básica alimentaria (CBA) que define el umbral de indigencia de la población y la canasta básica total (CBT) que se utiliza para determinar el límite de pobreza, aumentaron 3,7 por ciento en cada caso, por encima de la inflación promedio nacional de 2,9 por ciento que informó la última semana el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).
En términos interanuales, ambas canastas aumentaron 55,8 por ciento, también por encima del 49,3 por ciento que arrojó el IPC, lo que muestra cómo la inflación, principalmente en los alimentos, afecta proporcionalmente más a los sectores de bajos ingresos, que se caracterizan por la alta proporción que destinan de sus ingreso a bienes y servicios básicos, en comparación con el resto de la sociedad.
La CBT aumentó a 26.442,92 pesos para un hogar promedio, que es el ingreso mínimo que requiere una familia para no ser clasificado como pobre en las estadísticas nacionales.
En tanto, la CBA ascendió a 10.577,16 pesos para un hogar también promedio integrado por 2 adultos y 2 menores, que es el ingreso mínimo que requiere una familia para dejar de ser indigente.
Para un adulto, la CBA ascendió a 3.423,03 pesos en enero, en tanto la CBT trepó a 8.557,58 pesos, publicó Infobae.