Preservación de la biodiversidad en el humedal con planificación estratégica
Por Nicolás Rochi (Paralelo 32).- Desde el INTA Nación se promovió una serie de talleres institucionales sobre ganadería en islas, donde la sede Victoria tuvo la responsabilidad de coordinar esta propuesta a partir de esos lineamientos que fundamentalmente apuntan a aggiornar una guía de buenas prácticas en el Delta del Paraná, que involucre la parte técnica con el saber empírico de los productores.
Al respecto, el Ingeniero Agrónomo y jefe del INTA local Raúl Brassesco dijo a Paralelo 32, “son millones de hectáreas, donde un 83 por ciento de la superficie del Delta del Paraná corresponde a territorio entrerriano e involucra los departamentos de Islas del Ibicuy, Gualeguay, Diamante y Victoria. Esta última con 405.000 has, de las cuales unas 125.000 se estima que son fiscales”.
También destacó la importancia del humedal por sus servicios ecosistémicos que brinda, “pero el más importante es la provisión de agua potable, que en el caso del Delta del Paraná, asiste a más de 15 millones de personas, y abastece al Acuífero Guaraní, estando entre las tres reservas de agua dulce más grandes del mundo”.
Para avanzar en la temática, Brassesco precisó que se presentó un documento provisorio de 64 buenas prácticas en el humedal, armado por un equipo de trabajo de cuatro extensionistas con intervención en los departamentos mencionados (Ibicuy, Gualeguay, Diamante y Victoria) y un investigador de INTA Paraná, donde se favoreció la participación y debate con representantes de 16 instituciones entre ONG, Universidades, estamentos del Estado nacional, provincial, municipal (además del local, intervino el de Villa Paranacito), agrupaciones y entidades rurales de Gualeguay, y también de nuestra ciudad (SRV).
El jueves 2 de diciembre se hizo el plenario que abarcó la mañana y parte de la tarde, con la intervención de 35 personas, “donde los asistentes tuvieron la posibilidad de expresar su opinión, sea a favor o en contra, hecho que se valoró como parte de la deconstrucción. En la que además aportaron mucha información que suele escapársenos, generando todo un caudal de contenido que estamos sitematizando para reconstruir ese documento y volver a ponerlo en común”.
En líneas generales el entrevistado resumió que el objetivo es adoptar una ganadería responsable, “con alternativas tecnológicas a las quemas; donde también notamos que hay una cuestión de ordenamiento territorial por parte de las jurisdicciones departamentales, evidenciable en la administración de las tierras fiscales sumado al control en diversos órdenes, que es un tema complejo”.
Brassesco añadió como ejemplo el parque de 25 mil lanchas que tiene el lado santafesino, “de las cuales, entre 3 y 4 mil ingresan al suelo insular victoriense durante los fines de semana, con todo lo que ello implica”.
El jefe del INTA local insistió: “para preservar este ecosistema ya no se puede ingresar de cualquier manera, ni tampoco producir, pescar, cazar, etc. sin determinados parámetros que ayuden a minimizar ese impacto en la biodiversidad”.
Otras valoraciones
Las buenas prácticas ganaderas hacen hincapié en cuestiones básicas a partir de un documento que se pueda replicar, “donde alguien que no tenga conocimiento de la isla, o no conozca el territorio lo pueda entender y replicar. Es el qué hacer, no el cómo. Entonces, la guía de buenas prácticas te indicará qué tenés para hacer”.
— Cuando a alguien que trabaja hace tiempo en un lugar se le sugiere qué hacer seguramente surjan tensiones y contrapuntos, ¿Cómo se maneja este tema?
— “Claro, una de las cuestiones que se pusieron en debate fue el tipo de razas vacunas se adaptan mejor al humedal, a un sitio que está en permanente fluctuación sus cursos de agua. Y el animal tiene que convivir en ese ambiente anegado prácticamente. Y una cosa que surgió de los productores respecto de nuestra propuesta de razas cruza (británicas con índicas) donde lo típico es el cebú, y surgieron aportes de Ibicuy que daban sus razones, poniendo en situación cuando deben salir por inundación en arreo con los animales. Ellos nos aclararon que no hay que cuidar tanto al ternero, como era nuestra idea, sino al toro que por su joroba tiende a bajar la cabeza cuando cruza largos trechos y termina por ahogarse. En cambio el ternero, le apoya la pera en las caderas a la vaca, y así cruza sin problemas”.
Brassesco dijo que esa información apoya lo científico, dando cuenta que las razas cruzas son mejores para la adaptación en estos escenarios naturales, y configura un aporte respecto de la mortalidad en los traslados con ese basamento empírico. “Uno ha investigado y visto, pero esos detalles de boca de los productores o del que habita en la zona, tienen un valor central”.
Proyección para comunas
Otro tema de interés en el transcurso del 2021 para INTA fue la participación en las reuniones de planificación de comunas, a diez años. El personal de la agencia inició en la comuna de Antelo cuando estaba Néstor Ledesma, y luego de su lamentable fallecimiento, retomó los encuentros con Claudio Taborda, vecino que asumió el cargo. “La idea es brindarle una mano con el plan de desarrollo estratégico de la comuna a una década, que por estas cuestiones de fuerza mayor se demoraron un poco; sí pudimos tener otra dinámica en Rincón del Doll”
Al respecto, una de las primeras cosas a plantear es la delimitación de ejido urbano, “Que en Rincón no es simple dado que tiene una suerte de agrupaciones urbanas dispersas, y el territorio es más amplio. Este punto seguramente será más fácil de resolver en Antelo donde todo está más acotado”.
Una vez que se logra consensos en este punto, se avanza en el dictado de normas que hagan al funcionamiento de un casco urbano, continuó Brassesco, “imaginemos todo, desde construcciones, circulación vehicular, lugares de esparcimiento, producción, servicios, etc. Y que se hace desde abajo hacia arriba, que es como se deben emprender los procesos de desarrollo, es decir se hace el mapa de actores, y es la misma gente la que propone y dispone qué hacer”.
En definitiva, “hay que preguntarle a la gente hacia dónde quiere ir, en qué tipo de comuna quieren convertirse a diez años. Es un proceso creativo, que anduvo muy bien en Rincón, con la participación de unas treinta personas, y a pesar de las diferencias, estuvieron presentes la oposición y el oficialismo, que era una de las condiciones que pusimos sobre la mesa, porque como todo proceso, necesita del aporte de todos”.
Nuestro interlocutor trajo a colación que en 2018 hubo un primer intento de planteo de planes de desarrollo a diez años, “pero venía gente de Buenos Aires, es decir, se hizo desde arriba hacia abajo, que es todo lo contrario a lo que se debe hacer”.
Dentro de esos abordajes, en Rincón Doll surgió la problemática del acceso asfaltado desde la Ruta Provincial Nº 11, “que destacaron es fundamental para su desarrollo, además del mantenimiento de caminos, para integrarlos; y la falta de trabajo como otro factor decisivo”
— Qué ocurre con la migración del campo a la ciudad, y dentro de este desgranamiento, ¿cómo inciden las tecnologías o la ausencia de conectividad?
— “En todos los congresos que he participado para la generación de empleo joven, surge la problemática de la conectividad como un factor decisivo para quedarse o rechazar un trabajo en zona rural. Esto fue otro condicionante que también saltó en los intercambios en Rincón Doll, los jóvenes necesitan estar conectados permanentemente. Hoy caminos y tecnología constituyen la infraestructura estratégica básica, una depende del Estado, y la otra no tanto, pero son puntos clave en cualquier consideración de proyección”.