Luis Corradi: “Las generaciones nuevas deben entender que la bandera tiene un sentido”
Crespo.- Se realizó en nuestra ciudad la Exposición Itinerante de Banderas y Escudos, que organizó la Municipalidad de Crespo en conjunto con el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, cuya Dirección General de Protocolo y Ceremonial fue responsable de la muestra.
Durante el acto de inauguración de la exposición, en la Sala Eva Perón el vexilólogo (vexilología: ciencia que estudia las banderas, N. de R.) Luis Corradi, a partir de preguntas de Paralelo 32 y del público asistente, explicó cuestiones sobre protocolo y sobre historia de la bandera argentina ante autoridades municipales y militares, prensa, docentes y alumnos y público en general que se hizo presente en el acto. “Cada uno de los elementos que integran el paño de una bandera habla, por sí solo, de la historia, de la grandeza, de la riqueza, y también de la parte honorífica del lugar”, señaló Corradi al comienzo de su exposición.
– ¿Cómo se modifica una bandera?
— La bandera debe modificarse siempre por ley, por una ordenanza si se trata de bandera municipal. A nivel nacional, tenemos una ley de 1944, es la última ley. Pero, afortunadamente, se determinó hace poco que en 2016 iban a empezar a regir las normas IRAM. Están tan bien presentadas que hasta la forma del cocido está indicada. Ahí está, felizmente para mi criterio, descripto claramente cómo debe ser la figuración, cuántos rayos debe tener, de qué formato los rayos. Son elementos ricos para nosotros, los especialistas en la materia. La dimensión correcta de la bandera es 1,44, que generalmente se toma 1,40, por 90 centímetros. A partir de ahí se lleva en proporción a mayor o a menor tamaño.
– En la exposición hay un retrato histórico y tradicional de Belgrano. ¿Por qué se presenta en la muestra?
— Es una imagen que quiero destacar porque es la verdadera cara de Belgrano. Y porqué lo digo. Belgrano no se hizo un daguerrotipo, como San Martín. En 1815 a Belgrano le dan, junto con Rivadavia, una misión diplomática a Gran Bretaña. Allá encuentra un gran pintor de retratos, Carbonier. Es quien hace los dos famosos retratos de Belgrano y de Rivadavia. Si Belgrano compró esa obra, es porque realmente sentía que estaba plasmado su rostro. Junto a la figura de Belgrano hay imágenes que él describe a Carbonier, para que las incluya en el cuadro. Está la batalla de Salta, que había ganado Belgrano. También hay un puntito blanco, que es la bandera argentina que Belgrano le hizo pintar a Carbonier. Era una bandera fajada, blanca y celeste. Recordemos que está mal decir, bandera franjada o a franjas. Cuando dicen ‘franjas celeste y blanca’ está mal. Se llama fajada. La bandera del cuadro de Belgrano es una bandera con una faja blanca arriba y una faja celeste abajo. Es una de las cuatro banderas que Belgrano presentó. Otra era como la nuestra actual, y otra era la Bandera de Macha: blanca, celeste y blanca, que se transformó en la bandera oficial de la Provincia de Tucumán. Hay una anécdota sobre la bandera de Macha. Cuando Belgrano ve que las tropas realistas lo están venciendo, manda a esconderla en la ciudad de Titili, detrás de un cuadro de la iglesia. El párroco la escondió, en 1815. En una limpieza que hacen sesenta años después… yo siempre digo que esto es un chiste, sesenta años tardaron en limpiar la capilla. Encontraron la bandera, y se dieron cuenta que era una reliquia.
– ¿Qué es una reliquia?
— Es una bandera que no se puede lavar, es la única bandera que no se puede lavar. Todas las banderas se lavan. Encontraron esa bandera, se dieron cuenta que era una reliquia y a partir de ese momento se la quedó el pueblo de Bolivia. ¿Es correcto que se la quede Bolivia?
– Era parte de las Provincias Unidas en el momento de su ocultamiento.
— Correcto, Bolivia no existía. El Cono Sur eran las Provincias Unidas del Río de la Plata. Esa bandera pasa a ser una bandera histórica de la zona. Que después haya sido Bolivia, es aparte. ¿Qué hizo Bolivia? Nos dio una copia de esa reliquia. También están las banderas originarias, de pueblos originarios. No se trata de banderas históricas, porque las banderas históricas se refieren a una época de la historia de un lugar. Los pueblos originarios no tenían banderas, pero hoy en día tienen representaciones en banderas como la bandera Wiphala. Todo ese tipo de banderas hablan del movimiento étnico.
Presentación de banderas
– ¿Cómo es el sistema protocolar de las banderas?
— Primero van las banderas de ceremonia, las banderas de Estado, luego van las banderas de provincias y después las banderas de organizaciones, o de jefaturas de gobierno.
– ¿La bandera del país anfitrión siempre va adelante?
— En el país anfitrión, en este caso, la bandera nacional argentina, va a la derecha. La bandera argentina nunca sede su derecha. Siempre, la bandera del país invitado va a izquierda de la bandera argentina. Y si es una organización, la bandera va unos pasos más atrás. Nunca puede una bandera de Estado estar al lado de la bandera de una multinacional, o de una bandera de organización.
– ¿Cuándo hay varios estados como se distribuyen las banderas?
— Depende del número. Si la cantidad de estados es impar, la bandera nacional va al medio. Y si es par, la bandera nacional va a su derecha. En este caso, las demás banderas se van disponiendo en orden alfabético. Si la cantidad de banderas es impar, el orden alfabético se va escalonando a un lado y al otro de la bandera anfitriona. Y cuando hablamos de orden alfabético, surgen dudas. Por ejemplo, ¿es Alemania? ¿O usamos Germania, por Germany, en inglés o Detschlandd, en alemán? Si estamos en Argentina se usa el nombre en castellano, Alemania, para la precedencia por orden alfabético.
– ¿El protocolo es específico de cada país, o hay reglas son generales en todos los países?
— Existe un protocolo a nivel internacional y existe un protocolo de territorio. Argentina tiene un protocolo, aunque no se respeta mucho. Pero tiene un protocolo de tal forma que, por ejemplo, si una bandera cuadrada pisa territorio nacional, inmediatamente la hacemos oblonga, se transforma en rectangular. Por ejemplo, las banderas de Suiza y del Vaticano, son las únicas banderas del mundo cuadradas. Cuando tocan suelo nacional toman nuestro protocolo. Se ha dado el caso y yo he tenido diferencias con otros países, por el uso del moño en la bandera de ceremonia. El moño es inherente a nuestro protocolo. Pero en otros países no lo quieren y no lo presentamos. Muchas veces, el protocolo que rige es el del lugar.
– ¿Qué banderas se pueden lavar y cuáles no?
— La única bandera que no se lava es la bandera de reliquia, la que estuvo en un campo de batalla. No se toca, no se lava, no se le hace absolutamente nada. Todas las demás se lavan. ¿Por qué? Porque existe una ley que estipula que la bandera debe estar en perfecto estado de aseo. Perfecto estado de aseo significa que las bandas deben ser de colores celeste, blanco y celeste. No celeste, ‘gris’ y celeste. Cuando vean una bandera gris, no están ante un patriota, están ante un sucio. La bandera de ceremonia se lava a mano, con jabón blanco. La bandera de flameo se puede meter en un lavarropas como cualquier prenda.
Descarte de banderas
– ¿Qué pasa con las banderas rotas?
— Las banderas rotas se cambian, no se mantienen por una ‘cuestión de argentinismo’.
– ¿Se queman las banderas rotas?
— En una época se quemaban. Pero después, por una cuestión de costos, dejó de hacerse. Ahora, lo que se hace, por ejemplo, es que una bandera de flameo, vieja o rota, que se va a descartar, se mete en una bolsa, se ata la bolsa y se la tira a la basura. En el caso de la bandera nacional argentina de ceremonia, se recorta la banda celeste, se recorta la banda blanca. Obviamente queda la otra banda celeste aparte. Se recorta el sol de la banda blanca y se lo guarda en un sobre; lo demás se tira como una tela. Todo esto se realiza con testigos y se asienta en un libro. Antes se quemaba. En Buenos Aires pasaba un camión municipal de residuos y se llevaba a los incineradores del Cementerio de Chacarita. Pero dejó de hacerse por costos.
– En la Escuela de Comercio hubo una ceremonia de reemplazo de bandera nacional donde se quemó la bandera ahí y se enterró en el patio.
— Pudo ser una situación muy particular. Hay que recordar que el protocolo siempre cambia, se agiorna, nunca está quieto. Si se hizo así, seguramente lo vieron o escucharon en algún lado, pero yo no vi nunca ese procedimiento: que se queme o se entierre, no lo vi nunca. Es más, a título personal como vexilólogo no lo acepto. No sé cuál es el mensaje al enterrar una bandera.
Bandera civil y bandera de guerra
– ¿Cuál es la bandera que corresponde usar y cuándo? ¿La bandera con sol o la bandera sin sol?
— ¡Qué linda pregunta! Cuando nace la bandera, en 1812, Belgrano entiende una bandera con sol. ¿Por qué? Estaba la bandera mayor y la bandera menor. La bandera mayor después se llamó ‘bandera de guerra’. La bandera menor era la ‘bandera de la ciudadanía’. Hoy en día, el Ejército tiene una bandera con la relación 1,20, que es muy distinta a la de la relación 1,40. La Armada también tiene su bandera muy significativa, que no es la nuestra. Pero que el protocolo de la Armada la permite. Desde 1985 se determina que tienen que ser todas las banderas con sol. Todas. Ya no existe la diferencia entre banderas de guerra y de uso civil. Todas deben llevar el sol.
– ¿Se usan banderas para decorar lugares, paredes, escritorios?
— Si hay que ‘decorar’, no se hace con banderas. Si tienen una mesa y ponen una bandera encima, no lo hagan delante mío. Es terrible. No digan que son patriotas y ponen sobre la mesa una bandera. No lo hagan nunca. Si quieren decorar con los colores patrios, sáquenle el sol, y ahí estamos hablando de una ‘tela color patrio’. Si festejo un triunfo deportivo internacional y cuelgo la bandera de mi balcón, nunca se cuelga en vertical. Siempre se cuelga en oblonga, porque tiene que ser la imagen de honor de la bandera. Los ojos de la figuración del sol deben mirarme a mí.
– ¿Qué jerarquías tienen las banderas históricas?
— Las banderas históricas en Argentina se toman como un elemento histórico, como los que hay en un museo, no sobresalen por algún punto especial.
Normas universales
– Ud. está dando cuestiones que parecen muy normativas, que podrían cambiar si mañana cambia el protocolo. ¿Hay normas más ‘científicas’ o universales sobre banderas?
— Hace 50 años nació la vexilología, la ciencia que ampara el conocimiento pleno de lo que son las banderas. Nace en Estados Unidos, se expande por el mundo y en Argentina tiene 20 años. Es una ciencia muy joven. Seguramente no escucharon nunca la palabra vexilólogo. Viene del latín ‘vexillum’ que es ‘estandarte pequeño’. ¿Estandarte por qué? Los antiguos romanos tenían una lanza y ponían una tela o un elemento metálico que los distinguía. Eso me lleva a otro tema: las banderas sirven para tres funciones. Aúnan, agrupan, representan. Guían, como segunda función. Y enseñan. Esos tres puntos son cruciales a la hora de entender para qué sirve una bandera. Existen elementos que distinguen para ver cómo crear una bandera. Para crear un distintivo existen parámetros. Hay cosas que no corresponden dentro de la ciencia de la vexilología. Si hay una excepción, debe ser homologada. Pero si tenemos que opinar, los vexilólogos planteamos crear banderas con colores básicos. No puedo pintar un color ‘en degradé’. Otra cuestión, si se introduce un elemento en la bandera, debe ser simétrico. Y lo más importante, si deben hacer una opción personal: la bandera debe entenderse a 50 metros de distancia. Si a 50 metros no se entiende lo que se hizo, hay que hacer otra cosa. Por ejemplo, a la bandera argentina a cien metros la distingo, la bandera española también. Durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, se sacaron unas arrugas y una comisura de labios que tenía la figuración del sol en la bandera nacional. Parece una tontería sacarle esos detalles a la figuración. ¿Por qué los sacaron? Porque a 50 metros debo entender que es una figuración. ¿Qué debe entenderse? Los ojos, la nariz y la boca. Si hago humanizados los detalles, está perfecto si los veo de cerca, pero de lejos son sólo una mancha. Estuvo muy bien haber sacado esos detalles. Un secreto de la figuración de nuestra bandera: no es una cara europea o latina, es una cara americana, un indio. Es una cara del altiplano: nariz ancha, boca grande y ojos almendrados. Belgrano sacó esa figuración diciendo que ‘si vamos a poner un sol, será un sol con figuración aborigen’. Hay quienes dicen que el sol lo puso por su rama masónica. La masonería primeriaba en esa época con el general San Martín.
Faltas al protocolo
– ¿Las banderas se pueden izar de noche al aire libre?
— No. Cuando se izan de noche se está faltando al protocolo. Las banderas tienen un reglamento que indica que ‘deben ocultarse cuando el sol se oculta y deben izarse cuando el sol sale’. Es el abecé del reglamento. Si queda alguna bandera izada de noche, solo es permitido por una ordenanza. Es el caso de la Ciudad de Buenos Aires, donde se determina vía ordenanza que pueden quedar banderas izadas de noche en Casa de Gobierno, los Ministerios y en bibliotecas. Son solo algunos lugares.
– ¿Qué penalidades existen por faltar respeto a la bandera o por faltas al protocolo?
— Ninguna, no hay una ley que imponga sanciones por faltar el respeto a un símbolo patrio. Se puede llegar a tomar como falta de respeto si prendo fuego a mi bandera nacional en plaza pública. Si la bandera toca el suelo, por ejemplo, es una falta de respeto. Pero no cabe una sanción.
– ¿Hay países que imponen sanciones?
— Sí, hay países que imponen sanciones. Por ejemplo, Estados Unidos es muy rico en ese punto. Se plantea que los colores de la bandera nacional, sea del país que sea, no es permisivo usarla de bufanda, de ropa interior. Yo digo que sí, que se puede hacer. Porque tienen que ‘casarse’ con los colores patrios. Las generaciones nuevas deben entender que la bandera tiene un sentido, el orgullo de haber nacido de tal o cual forma. Si tenemos gente que dio la vida por esto, y no lo entendemos, por las dudas vamos a respetarlo.
Quién es
Luis Corradi es vexilólogo y heraldista del Área Ceremonial y Protocolo del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; integrante de la Dirección General de Protocolo y Ceremonial del Gobierno porteño y miembro de la Sociedad Vexilológica Española. Integra el Centro de Altos Estudios en Ceremonial y Protocolo.
La Vexilología es una muy joven ciencia auxiliar de la Historia, y ciencia complementaria de la Semiótica (ciencia general de los signos, símbolos y textos discursivos). El politólogo estadounidense Whitney Smith, creó el término vexillology y lo publicó en 1958; deriva del latín vexillum que significa bandera. El vocablo fue posteriormente aceptado a nivel internacional. Los vexilólogos se agrupan en asociaciones nacionales y regionales unidas a la Federación Internacional de Asociaciones Vexilológicas (FIAV). Son ciencias auxiliares para el historiador son: Heráldica, que estudia los escudos de armas; Sigilografía, que estudia los sellos oficiales; Diplomática, que estudia los documentos históricos; Genealogía, estudio de ascendencia y descendencia de las personas; entre otras disciplinas.
Ceremonia, ornato y flameo
“Destacamos la diferencia de una bandera de ceremonia con respecto a una bandera de flameo. La diferencia puntual es la calidad de la tela, mayor en la bandera de ceremonia. En particular, la corbata habla de una bandera de ceremonias. El detalle es la punta, que es una moharra, palabra de origen árabe. La moharra, en su momento fue un elemento para lastimar, de ahí la terminación en punta, pero ahora es sólo un ornamento. En la moharra de la bandera de ceremonia se entrelazan una punta de lanza con una media luna, que era en realidad la Media Luna islámica, árabe. Una bandera de ornato, decorativa, tiene en la punta una perilla”.
– ¿Qué diferencias hay entre banderas de flameo y de escritorio, por ejemplo?
— La bandera de flameo va en mástil, la de escritorio va en asta. La gran diferencia entre mástil y asta es que, el mástil es más alto y el asta está en escritorios, oficinas cubiertas o cerradas. Hay una proporción exacta entre el mástil y su bandera de flameo. Yo he visto cosas aberrantes. Lo que voy a decir es un ‘secreto’: la altura del mástil es cinco partes del ancho de la bandera. Siempre que vean un mástil, tomen cinco veces el ancho de la bandera que flamea en ese mástil, y esa es la proporción correcta. Si la bandera tiene un ancho de un metro, el mástil debe tener cinco metros de altura, por ejemplo. El ancho de la bandera se multiplica por cinco y ese debe ser la altura del mástil.
Colores
“Cada bandera debe ser cómo se lo exija el lugar. Si la bandera de Crespo va a tener alguna connotación personal de color amarillo, por ejemplo, no se puede pintar un naranja, tiene que ser exactamente el color amarillo. Porque la bandera es como el apellido de un lugar, no puede modificarse. Tiene tanta relevancia el color, que si van a otro país, el código color pasa a ser exactamente ese color de la bandera”.