La ministra de Salud de la provincia pidió “a los gremios estatales que sean férreos representantes en la defensa de los trabajadores, pero que sean respetuosos de las organizaciones y de quienes la conducen”
En el Salón Blanco de la Casa de Gobierno, el gobernador Gustavo Bordet tomó juramento a Sonia Velázquez como ministra de Salud de la provincia, en un acto donde estuvieron presentes el vicegobernador Adán Bahl, junto a miembros del gabinete, intendentes, legisladores nacionales y provinciales y demás funcionarios, así como gran cantidad de trabajadores de la salud de los distintos ámbitos donde prestó funciones la actual ministra.
Al hablar en el acto la flamante ministra subrayó que “hoy la responsabilidad de la conducción de una política pública en salud recayó sobre mi persona, tengo el honor de haber sido designada por el gobernador Bordet, con quien me unen los mismos valores y principios del accionar humano”. Luego señaló que “no es patriótico aceptar una designación sin definir un modelo de salud, con financiamiento, atención y gestión, predicarlo y comprometerse con él. Esto exige superar diagnósticos y las críticas sin propuestas, y construir una visión conjunta de las prioridades sanitarias, una agenda de políticas de salud para hoy que nos dirijan hacia el sistema que pretendemos alcanzar”.
Para la funcionaria, “el ejercicio de las responsabilidades relacionadas a las políticas de salud y las competencias inherentes a la autoridad sanitaria incluye decisiones y acciones públicas que son necesarias para garantizar y satisfacer las necesidades de salud y las aspiraciones legítimas de la ciudadanía”.
“El desempeño de esta función implicará diferentes dimensiones de responsabilidades; las mismas exigirán además fortalecer un compromiso explícito de acuerdo entre las jurisdicciones: el Ministerio de Salud de la Nación y los municipios”, agregó y afirmó que eso “exigirá desarrollar una función rectora de armonización con los distintos actores externos que interactúan con el sistema”.
Asimismo, destacó que “tenderá al fortalecimiento de la organización de redes de atención de salud, coordinadas, integradas y planificadas con criterios regional y funcional por complejidad creciente”. Y agregó: “Soy consciente de la necesidad de profundizar la consolidación de una estrategia de atención primaria como base de la organización del sistema sanitario”.
En ese marco, solicitó “a mi colegio profesional de trabajadores sociales y a todos mis colegas acá presentes, que sean custodios de un accionar ético y de la defensa de los derechos humanos”.
También pidió “a los gremios estatales que sean férreos representantes en la defensa de los trabajadores, pero que sean respetuosos de las organizaciones y de quienes la conducen. Recuerden que las mismas están para garantizar derechos a la salud de las personas”.
Además, a los legisladores les solicitó que “acompañen en el diseño de una política pública en salud, que contemple también al subsistema privado y al de las obras sociales, a la luz de los nuevos determinantes de la salud en proceso salud-enfermedad”.
“Pido a los municipios sostener políticas activas, posibilitando el acceso al agua potable y saneamiento para su población de cobertura. Estas acciones sustantivas, sumadas a otras, impactan notablemente en la disminución de enfermedades prevalentes y los ubicará en post de un trabajo con membresía de Municipios Saludables”, acotó.
Luego dijo que “como Ministerio de Salud, nos comprometemos a trabajar mancomunadamente con todas las áreas del Estado, a fin de fortalecer una política interinstitucional en post de una salud inclusiva, solidaria y con justicia social».
Finalmente, convocó “a todos a trabajar, a recuperar la mística, la vocación de servicio, la humanización de las prácticas, a conocer quiénes son, dónde viven, estos sujetos de derechos que se atienden en la red pública de atención”.