La historia de Juliana resume la de todos sus compañeros Bomberos Voluntarios de Ramírez
Ramírez- El pasado 10 de julio se conmemoró el 31º aniversario de la creación de la Asociación de Bomberos Voluntarios de General Ramírez. Su fundación se dio en 1990 y son muchos los ramirenses que han integrado esta institución de suma importancia social, siempre con el objetivo de ayudar a quienes lo necesitan.
Abnegación, sacrificio y desinterés son palabras que bien describen a quienes integran Bomberos Voluntarios. Ofrecen responsabilidad, compromiso y valor en cada salida y en cada suceso en que les toca actuar.
El 10 de Julio de 1990 comenzaba sus actividades la Asociación, cuando un grupo de personas se reunieron con el objetivo primordial de ayudar a quienes lo necesitaran, conformando esta institución tan importante para la localidad.
En todo este tiempo las historias y anécdotas se fueron sumando. También las personas que fueron pasando. Una de las que cumple funciones es Juliana Brickmann, de 31 años, nacida en General Ramírez. Ella, dentro del escalafón de Suboficiales, es Sargento, su padre, Edgardo Adolfo Brickmann, hasta 1993 la antecedió en la entidad.
¿Sos la única suboficial hoy en el Cuerpo? ¿Qué implica desde el punto de vista práctico, en relación al rango y la función?
Por el momento sí, soy la única. Ascender en jerarquía implica una mayor responsabilidad y crece a medida que la jerarquía es mayor. No sólo es más responsabilidad en una salida, sino también en toda actividad dentro de la Institución.
Actualmente somos 9 mujeres en el Cuerpo Activo. Como siempre digo, en nuestro Cuartel no se ven diferencias entre mujeres y varones, somos sumamente respetadas. Estamos atravesando como sociedad un gran cambio en torno a la mujer, y como institución acompañamos ese cambio, desde la integración hasta las responsabilidades.
¿Por qué tu decisión de ser bombero? Tiene que ver con la historia de tu padre relacionado con la institución?.
Ingresé al Cuartel por dos motivos: por un lado tenía amigos adentro de la institución y por el otro sí, mi papa. Él formó parte de los inicios, cuando aún no existía la Asociación de Bomberos Voluntarios en sí, sino que formaban “Defensa Civil”, allá por 1990. Este año se cumplen 9 años de que ingresé a la Institución.
¿Cómo es tu día a día? Es decir, como compatibilizás familia, trabajo, Bomberos, en la rutina diaria.
Es un equilibrio entre el trabajo, la familia y el Cuartel. A medida que uno crece y se vuelve adulto tiene más responsabilidades laborales o familiares, por eso uno está menos de lo que quisiera. Creo que hablo por todos mis compañeros cuando digo que a todos nos gustaría dedicarle más tiempo al Cuartel. Siempre sentimos que es poco.
Ser bombero es tener otra familia, que no es de sangre, pero que te apoya igual a una. También lo es cumplir con nuestra labor de una manera profesional. General Ramírez es una ciudad pequeña y la mayoría de las veces acudimos a salidas donde conocemos a los involucrados. Encontrarnos con alguna situación trágica conociendo a la víctima y/o su familia es el sinsabor más marcado de esta profesión.
¿Recordás alguna anécdota puntual o alguna situación o historia que te haya marcado?
Si me pongo a pensar son un montón, buenas y no tan buenas. Pero siempre cuento la que pasé hace unos 5 años, cuando asistimos a un accidente y posterior vuelco en el que iba mi abuela materna. Nunca me enteré de que ella estaba implicada hasta que llegué con la víctima del otro automóvil al Hospital. Creo que la anécdota resume el profesionalismo y humanismo con el que desplegaron y despliegan mis compañeros.
Desde la teoría ser bombero, es la persona que vela por la vida y bienes del prójimo; pero la práctica es más que eso: es acostarte dejando una muda a mano por si suena la sirena u organizar tus fines de semana con anticipación por si tenés capacitación, guardia o fajina. Es dejar a tu familia o amigos, almorzando solos un domingo porque hay un incendio en el campo, en el que probablemente se te vaya la tarde. Es una decisión que conlleva una gran responsabilidad, pero que ratifico diariamente.