El crecimiento del turismo ufológico en Victoria
Victoria.- El turismo ufológico consiste en brindarle al turista interesado en esa temática, las herramientas, acciones e información, relacionadas con casos e investigaciones afines. Así lo define la investigadora UFO Andrea Pérez Simondini, quien desarrolla junto a su madre, Silvia, el museo OVNI de la ciudad. Y es que, en el último tiempo, sobre todo evidenciado en el Congreso Internacional OVNI realizado, puede notarse el crecimiento turístico al respecto.
“A partir de distintas iniciativas se empezaron a desarrollar servicios para acercar a los turistas diferentes circuitos. Por ejemplo, uno de éstos te lleva a recorrer los lugares emblemáticos de avistamientos, que es un circuito nocturno y tiene como eje la Laguna del Pescado y el Cerro de la Matanza. La idea detrás del concepto de turismo ufológico es trabajar en red con la puesta en conocimiento y en valor de todo el aspecto geográfico, paisajístico y cultural de la ciudad”, desarrolló Andrea.
En cuanto al circuito diurno, contó que se ofrece al turista la posibilidad de conocer los lugares donde se dieron los casos emblemáticos. “Esto va de la mano de lo que el turista conoce cuando visita el museo. Para nosotros es muy importante el abordaje objetivo sobre el estudio y la investigación del fenómeno para que la gente se vaya con información veraz y profunda”, señaló.
Asimismo, expresó que el crecimiento del turismo ufológico en Victoria es “notable”. “Nosotros tratamos siempre de resguardar y profundizar de la mano de la ciencia. Esto también es muy observado por el visitante cuando viene a Victoria”, dijo.
— ¿Qué pasa en el cielo de la ciudad?
_Con mi mamá [Silvia] tenemos debates. Ella tiene una mirada de que algo hay, en realidad, debajo del agua. Lo afirma por todas las experiencias que ha vivido y los relatos que hablan de eventos lumínicos que entran y salen de la Laguna del Pescado, Laguna Grande, y eso le da un marco de que existe un fenómeno ya localizado. Por mi parte, tengo una mirada más estadística, en la que pienso que, en realidad, hay más gente predispuesta a denunciar y al haber investigación y un centro de referencia como el museo se exponen más los casos. Lo que sí es cierto es que, estadísticamente, cuando pasás los filtros y te quedás con los casos que no tienen explicación, termina siendo una variable alta; cuando el promedio general está entre el 5 y 6 por ciento, en Victoria trepa hasta el 10 por ciento esa estadística de no reconocible. Y ahí se pone interesante porque estamos hablando de, por ejemplo, eventos lumínicos donde entran y salen del agua, y entran y salen de la atmósfera. Finalmente, Andrea destacó que el trabajo de su madre ha logrado posicionar a Victoria como un destino importante en cuanto al turismo ufológico. “Esto genera mucho trabajo. De hecho, el congreso internacional que hicimos este año en mayo, hoy es uno de los diez congresos más conocidos del mundo. En esta última edición hemos tenido un lleno total con mucho impacto económico. A la ciudad, el congreso le dejó 4 millones y medio de pesos entre alojamiento, gastronomía y servicios”