El Celeste celebró su 102º aniversario con varios proyectos en marcha
Victoria.- El club Sarmiento celebró su 102º aniversario en consonancia con nuestra fecha independentista, y si bien las restricciones impidieron el tradicional lunch, a modo de agasaje a los simpatizantes e históricos referentes del Celeste, desde la comisión directiva su presidente Jorge Vechetti comentó a este Paralelo 32 detalles de lo que ha sido este último semestre en torno a las reformas y obras en la cancha, y lo arduo que resulta el sostenimiento de sus inversiones y gastos corrientes.
No es tarea sencilla presidir una de las instituciones más convocantes de la ciudad, teniendo que sobrellevar la casi nula posibilidad de organizar eventos para recaudar fondos. Más allá que Sarmiento tenga más de 800 socios activos, y en sus distintos espacios (Gimnasio sede, cancha auxiliar y principal) convoque a distintas disciplinas como patín, vóley, handball, hockey, básquet, bochas y fútbol, el desafío de es brindar las mejores condiciones a ese millar de deportistas que practican una disciplina, mientras visten su característico color.
“Antes que nada, queremos informar a todos los socios que nos consultan a través de diversos medios, que más allá que se haya vencido el mandato, se han prorrogado su vigencia por decreto provincial, y esto aplica para la mayoría de las instituciones”, comenzó aclarando el entrevistado.
Amplió que el 2019 fue el único año que se pudo trabajar con relativa regularidad, “porque sobrellevamos un 54 por ciento de inflación. Y desde 2020 a la fecha, con el período de pandemia, prácticamente no se puede organizar ningún evento masivo”. Días atrás la sede tuvo concurrencia del equipo de patín competición, pero esta actividad fue filmada para hacer lugar a la competencia federativa, que utiliza ese material para juzgar la calificación de los clubes participantes. Por ende, esa demostración que bien podría llevar público, se debe limitar a ceder el espacio para que la entidad no deje de intervenir en la competencia.
Este último es un ejemplo de lo que ocurre seguramente con otras tantas opciones de público e ingreso genuino que puede tener cualquier club de la ciudad. Incluso sus cantinas, también llamados bufetes, tienen problemas para mantener un ingreso que cubra el canon licitatorio, dado el número reducido de concurrentes que se habilita.
“Vamos subsistiendo a base de venta de pollos y carne con cuero; también conforman un gran espaldarazo las rifas o el lanzamiento de bonos contribución, como el que está en circulación ahora y sortea en noviembre, con importantes órdenes de compra (320 mil pesos la primera premio; 100 mil la segunda; y 40 mil la tercera)”, dijo contundente Vechetti.
En la sede de Chacabuco al 247, además de la adquisición de computadoras e impresora para la parte de administración, la actual comisión dio “solución a un problema de décadas”, reconoce el presidente al referirse a “un desagüe que afectaba parte del inmueble en días de lluvia”.
Novedades en la cancha
Paralelo 32 ha sabido auspiciar parte de las propagandas en cartelería que cubrían el paredón perimetral, luego que la entidad hiciese una importante inversión en mejorar la superficie con 50 camionadas de tierra, y el sembrado de césped, fue colocando un sistema de riego, y ahora ya tiene toda la luminaria para mejorar ese aspecto del campo de juego, si bien resta la construcción de las torres, hecho por demás oneroso y que seguramente vendrá a continuación de la considerable intervención que les está demandando la construcción de una tribuna de cemento de más de 20 metros largo por cuatro de ancho, “quizás la más grande y con mayor capacidad de la ciudad, y donde hemos recibido un subsidio para este cometido”. Para graficar las dimensiones, el directivo habló que se extiende por todo un lateral del campo, más precisamente el que encuentra paralelo a calle Dorrego. Tendrá cinco escalones y la posibilidad para que entre 350 y 400 personas se sienten cómodas a disfrutar del cotejo.
A la par de esta inversión, se está construyendo, de espaldas al bulevar Moreno, un lugar para montar el parrillero de 9 metros, con espacio para brindar un servicio de comidas rápidas durante los partidos; y ya se concretó un sector de vestuarios, con cuatro duchas de agua caliente, y baños. Lo mismo, pero en menor dimensión se ha resuelto para los árbitros: “que cuando les toca ‘cobrar’ un partido, ponderan de sobremanera”.
También en el predio futbolero, hay espacio para un gimnasio, así que los jugadores realizan allí algunos ejercicios precompetitivos, y rehabilitación, en caso de necesitar superar alguna lesión.
Algunos números
Sobre el cierre de la nota, donde el directivo envió un cordial saludo “a la distancia para todos los socios”, nos pareció relevante preguntar cuánto paga un club por iluminar una cancha como la de Sarmiento, “entre 7 y 9 mil pesos mensuales; eso se gasta para hacer lugar a las practicas. Y en la sede, el costo ronda los 5 mil, a lo que se suma gas y teléfono. Y el personal de maestranza, superamos los veinte mil de gasto fijo”. Los socios mujeres y juveniles pagan 50 pesos; el resto debe abonar 100 pesos, pero con este valor de cuota, sumado al porcentaje que percibe el cobrador, todo se debe ajustar al detalle para que la entidad atraviese de la mejor manera un tiempo donde las certezas no sobran.