Sociedad
Argentina, entre los países más felices del mundo pese a la crisis económica y la inseguridad
Según el Índice de Felicidad Global 2025 elaborado por IPSOS, el país se mantiene dentro de los 15 primeros puestos a nivel mundial, por encima de potencias como Estados Unidos, Italia y Canadá.
A pesar de los serios desafíos económicos y sociales que enfrenta, Argentina conserva un lugar destacado en el ranking mundial de felicidad. Así lo revela el reciente informe del Índice de Felicidad Global 2025, elaborado por la prestigiosa consultora internacional IPSOS, la tercera empresa de investigación de mercado más grande del mundo. De acuerdo al estudio, que abarca encuestas realizadas en 30 países, Argentina se posiciona nuevamente entre las 15 naciones más felices del planeta, superando a potencias como Estados Unidos, Italia, España y Canadá.
El informe, basado en la percepción de bienestar subjetivo, muestra que el 71% de la población global se declara feliz, aunque advierte sobre una preocupante tendencia a la baja: desde 2011, la felicidad ha disminuido en la mayoría de los países analizados. En este escenario global de creciente insatisfacción, la resiliencia argentina resulta llamativa.
Las fuentes de felicidad en el país
En Argentina, la fortaleza de los vínculos personales sigue siendo la principal fuente de bienestar. La familia, los hijos y sentirse querido constituyen los pilares más firmes de la felicidad, un patrón que se repite transversalmente en casi todas las generaciones encuestadas. Esta valoración de los afectos y las relaciones cercanas compensa, en muchos casos, las dificultades económicas y las preocupaciones cotidianas.
El informe no detalla posiciones específicas del ranking 2025, pero confirma que Argentina conserva su lugar dentro del grupo de los 15 países más felices del mundo, lo que refleja una notable estabilidad en la percepción del bienestar nacional. En 2024, ya había sorprendido al ubicarse en el puesto 13.
El lado oscuro del bienestar: inseguridad y economía
Sin embargo, cerca del 30% de la población argentina manifiesta insatisfacción, principalmente vinculada a dos factores persistentes: la inseguridad y la situación financiera personal. Estos temas aparecen como las principales amenazas al bienestar emocional de los ciudadanos.
La inseguridad, en particular, representa una sombra constante. Según datos del Observatorio de Seguridad de Verisure Argentina, los delitos contra la propiedad muestran patrones claramente identificables. En comercios, el mayor riesgo de intrusiones se da entre las 2 y las 3 de la madrugada, sobre todo los fines de semana. En los hogares, en cambio, los incidentes se concentran alrededor de las 21 horas.
“El reto que tenemos quienes estamos vinculados a la seguridad de las personas es ofrecer soluciones inteligentes que permitan un mejor estado de ánimo frente a las incertidumbres de lo que podría sucederles tanto dentro como fuera del hogar”, explicó Carlos Beltrán Rubinos, director de operaciones de Verisure Argentina.
Entre las modalidades delictivas más frecuentes se destacan los robos a viviendas habitadas, asaltos a locales comerciales, entradas forzadas a departamentos y hechos delictivos en la vía pública. La provincia de Buenos Aires lidera en cantidad de incidentes registrados (75%), seguida por Córdoba (14%), Mendoza (7%), Santa Fe (4%) y, en menor medida, Tucumán y Entre Ríos.
Una felicidad resiliente pero condicionada
El Índice de Felicidad Global 2025 pone en evidencia que, pese a los problemas estructurales, los argentinos mantienen una actitud resiliente y una fuerte apuesta por los vínculos personales como sostén emocional. No obstante, también señala que las condiciones de seguridad y estabilidad económica siguen siendo aspectos clave para consolidar una mejora sostenida del bienestar general.