Ahí viene el barrenador
** Los argentinos vivimos más irritados que ojos de motociclista pobre. Motivos sobran; usted los toma o los deja, pero hay muchos. Estábamos indignados porque las pensiones por discapacidad se entregaban tipo chupetines en el día del Niño, y ahora indignados por la mala praxis de los que intentan corregir aquel reparto a la kermesse. Abordaremos este tema en la presente columna, pero antes déjenos –sufrido lector- ponernos a salvo del barrenador, que viene comiéndose los cogollos y lo peor es que puede ir por más.
** El peor enemigo es el que se ampara en su insignificancia. Es la hormiga colorada que nos ataca mientras nos armamos para enfrentarnos con elefantes. Deberían saberlo las legiones que salen a combatir el mal con armas pesadas y vehículos blindados pero olvidan usar lupas y los microscopios. ¿Usted no siente como que lo sopapean de todos lados y no logra ver de dónde? En este país, pasa. Pero si además siente una ardiente picazón en la entrepierna, pueden ser las coloraditas. El cogollero ataca por el otro lado.
** Un pequeño barrenador puede acabar con un bosque y luego con todos los del planeta, por ejemplo. Créame, un chacarero que siembra maíz se espanta más cuando le anuncian que le entró el barrenador al cultivo, o el gusano cogollero, que si le dijeran que Cristina K será ministra de Agricultura.
En 2008 los chacareros salieron a las rutas contra la Resolución 125, que fue como un malón de 125 elefantes que se les venía al humo. Sabían, sin embargo, mientras estaban allí, que si la chinche les atacaba la soja o el barrenador al maíz, podría irles mucho peor. Hasta a los honguitos microscópicos les temen. Son como la corrupción, no se ven pero pudren todo.
Los buro, los zoo y los CEO
** Cuando no hay sequía o diluvio, los chacareros andan navegando entre estos dos mares: el de los gobiernos que juegan en contra, o el de los que quieren jugar a favor pero lo hacen peor que Messi al día siguiente de su casamiento.
Aclaremos dijo Ramos (¿o Ramos era el que rimaba con lo otro? No importa. La diferencia entre el barrenador burocrático (o burobarrenador) y el barrenador zoológico (zoobarrenador), es que al primero le gusta “el verde”, mientras que el segundo tiene preferencia por la madera, que le apetece tanto como el papel verde a los “buro”.
** Claro que la corrupción no es solo del Estado (burobarrenadores). No olvidemos a los CEObarrenadores. Sería olvidar a tantos próceres de la punga local y transnacional, porque no hay corruptos sin corruptores. Donde hay un mafioso que cobra hay otro que paga.
** Aristóteles decía que el amor desordenado al dinero hace a veces, por ejemplo, que el médico no atienda a los enfermos para curarlos sino para cobrar. Desaparece, en el ejemplo de Aristóteles, el servicio como objetivo final; podría perder el interés en curar al paciente cuando éste no puede recompensar al médico económicamente.
Trajinando el maizal
** Podría decirse que el bichito de la ambición desmedida (burobarrenador) puede penetrar todos los ámbitos del Estado y corromperlo hasta contaminar todo. Porque corrupción equivale a desnaturalización. El funcionario que se enfoca en “hacer negocios” se desvía de la función que le es propia. La ‘guita’, ‘los verdes’, ‘el oro’, el éxtasis por las bóvedas, aparecen como objetivo final y no el servicio a la sociedad.
** Usted quizás era muy chica o muy chico y no se va a acordar, pero hubo un aviso televisivo de Poder Ciudadano inspirado en la serie norteamericana Kung Fu, donde el maestro ciego explicaba al joven discípulo cómo controlar la corrupción:
–Maestro, ¿cómo se puede extraer el monstruo de la corrupción del corazón de los hombres?
_Pequeño Saltamontes, nadie puede regenerar una fruta podrida.
–Y entonces ¿qué puede hacerse?
_Elije buenos jardineros, controla cómo hacen su trabajo y así evitarás que la fruta se pudra.
–Pero maestro, el huerto es muy grande.
_Por eso no es tarea para un hombre solo.
** Al gusano cogollero no se lo puede fumigar, y querer combatirlo espiga por espiga con un palito en la mano, en un maizal de diez mil hectáreas, equivale a recorrer el país de punta a punta queriendo apretarle el cuello a cada corrupto.
Los chicos son buen negocio
** Las netbook del plan Conectar se pagaron 500 y 535 dólares cada una. El nuevo gobierno las está pagando 240 dólares. Por aquella plata malrobada, los chicos podrían haber recibido un software más desarrollado y un hardware más durable.
** Se cartelizaron las tres empresas proveedoras y cotizaron más o menos lo mismo, entre 500 y 535 dólares. Llegó el gobierno M (de Macri) y verificaron que las empresas cartelizadas (se ponen de acuerdo en cotizar lo mismo y repartirse el negocio entre los tres) acumularon en los últimos años ganancias extraordinarias entre 500 y 700 millones de dólares cada una (lo que hayan tenido que compartir en concepto de cometas, es asunto de ellos). Su trabajo consistía en recibir todo el material de China y ensamblarlo en Tierra del Fuego.
** Le facilito el cálculo: 500 millones de dólares, o 700 millones, en plata nuestra representan 8.250 millones y 11.550 millones, respectivamente. No es un premio del Quini6 sino mil de ellos.
Falló Guillermo Moreno, quien hizo fama de rotwailer que supuestamente atacaba a las empresas demasiado ambiciosas. Mordió solo a algunas pero a otras les movió la cola y jadeó con la lengua afuera. Para éstas, la era K fue las más próspera de todos los tiempos.
Tomala vos…dámela a mi…
** Mientras los K acusaban y acusan a los M de ser un gobierno favorable a las empresas, los M les dijeron a los empresarios que bajaran el precio porque se acabó la fiesta. Cotizaron 395 y 419 dólares los dos modelos (105 y 116 dólares menos que en los años anteriores). Como todavía se estaban pasando de vivos, los M les dijeron “muchachos; bajan en serio o abrimos la importación a China para que las manden armadas”. Entonces las cotizaron 240 dólares ($ 3.950 c/u).
** La diferencia en mangos criollos, por cada equipo para los chicos, es de unos 4.200 y 4.800 pesos menos. Si consideramos que para este año el gobierno nacional compra 500.000 notebooks, el país se está ahorrando unos 2.250 millones de pesos. Si construir un hospital cuesta 100 millones, nos estamos ahorrando 22 hospitales cada año, y esto es solo un botoncito de muestra.
Ya pasó el barrenador
** Habrá que investigar la población de Sojamarca fue atacada por el barrenador, porque bombardeos aéreos no hemos sufrido últimamente. Dicho esto por el impresionante crecimiento de discapacitados. Históricamente venían creciendo al ritmo del 2 a 3%, al nivel del crecimiento demográfico, se aceleró el proceso durante Nestor Kirchner; en 2006 habían crecido a 173.677 subsidios por diferentes grados de incapacidad. Actualmente rondan 1.800.000.
** Durante el primer mandato de su esposa Cristina fueron incorporadas unas 500 mil personas supuestamente incapacitadas, y la remató en su último año subsidiando bajo la figura de diferentes grados de discapacidad, otras 350 mil personas.
En la localidad de Guanaco Muerto (Córdoba) viven unos 600 habitantes y hay 480 pensiones por invalidez. El intendente de la localidad, que la gobierna desde hace 14 años, justificó en que hay mucha gente pobre ¿?
** Pero no hay peor cosa que un tartamudo queriendo alertar sobre un peligro. Apareció la ministra Stanley haciendo gala de una gran impericia. En vez de realizar una tarea de campo y verificar quiénes son pensionados truchos y luego hacer la depuración, conectó al revés los bornes de la batería y causó un chisporroteo infernal. Primero decretó unas 70 mil bajas y con ellos barrió a muchos que no solo están bien encuadrados sino que dependen de ese ingreso.
Un año atrás ya habían hecho una purga y no hubo reacción pública. Quizás fueron más prolijos por entonces.
** Vea, mire, si en medio de una ronda de mate en cocina chica, se prende fuego el Bram Metal, si usted lo patea tratando de apagarlo seguro que lastimará a varios. Es lo que parece haber hecho la señora Stanley. Por mucho menos un árbitro (Macri en este caso) expulsaría de la cancha a un jugador.
** Buena semana para ti y para mí. Vivan los padres buenos; bienvenido invierno y viva la noche más larga del año, porque tras ella el sol iniciará su regreso: viva el general Martín Miguel con sus cien gauchos de fuego.